A medida que varios países de Latinoamérica se ajustan a nuevas regulaciones o abren sus mercados al iGaming, la industria de las apuestas online enfrenta transformaciones clave en la región para el próximo año.
En Brasil, el ministro Jhonatan de Jesus instó al Gobierno a tomar medidas para evitar que los beneficiarios de programas sociales como Bolsa Família utilicen esos fondos en apuestas en línea. Si bien la Procuraduría General de la Unión ha señalado dificultades técnicas para implementar esta medida, el Supremo Tribunal Federal sigue respaldando la iniciativa. En paralelo, el 17 de diciembre, la Cámara de Diputados aprobó una reforma fiscal que incluye un Impuesto Selectivo (IS) sobre apuestas físicas, en línea y deportes de fantasía. Aunque este impuesto tiene el objetivo de reducir el consumo de productos como el alcohol y los cigarrillos, algunos actores del sector de juegos temen que una carga fiscal demasiado alta favorezca el mercado ilegal. Aún no se ha definido el porcentaje exacto del IS, pero se espera que se establezcan detalles en el futuro.
Por su parte, en Argentina, el debate sobre la regulación de las apuestas online continuará en 2025. La preocupación sobre el acceso de menores de edad a sitios ilegales y la sobrecarga publicitaria, especialmente en medios y equipos de fútbol, está en el centro de la discusión. Aunque se propuso una ley para regular más estrictamente la industria, el gobierno de Javier Milei busca presentar una nueva legislación que no sólo regule, sino que también permita el crecimiento del sector.
En Paraguay, en diciembre se aprobó una reforma a la Ley N° 1.016/1997, que regula el juego en el país. La reforma tiene como objetivo fortalecer la Comisión Nacional de Juegos de Azar (Conajzar) y aumentar los ingresos fiscales mediante una mejor fiscalización. También se propone liberalizar el mercado, eliminando monopolios y promoviendo la competencia en todos los niveles.
En México, se avanza en la modernización de las leyes de apuestas online. La Asociación de Permisionarios y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juegos de Apuesta (AIEJA) apoya la reforma de una ley que lleva más de 70 años sin cambios significativos. A pesar de los problemas de competencia ilegal y falta de control, la reforma busca mejorar la transparencia, atraer inversión y generar ingresos, además de crear un entorno fiscalmente seguro. Actualmente, la industria emplea a 60,000 personas y genera 646 millones de dólares en impuestos.
Por último, en Chile, el proyecto de ley que regula las plataformas de apuestas en línea fue aprobado por la Cámara de Diputados. Esta nueva normativa busca crear un mercado competitivo y transparente, protegiendo la seguridad de los jugadores. Además, promueve una fiscalización efectiva, sanciona las plataformas ilegales, y establece una Política Nacional de Apuestas Responsables. También se proponen medidas para proteger a menores y regular la publicidad, mientras se destina un 2% de las apuestas deportivas al financiamiento del deporte. Las plataformas deberán cumplir con estrictas regulaciones fiscales.
En resumen, 2025 se perfila como un año de importantes avances en la regulación de las apuestas online en Latinoamérica, con esfuerzos por fortalecer la industria, proteger a los usuarios y asegurar el cumplimiento de las normativas.