
Clubes de las cuatro divisiones del fútbol brasileño protestaron esta semana contra la restricción a la publicidad de las casas de apuestas deportivas propuesto en un proyecto de ley en el Senado, y estimaron que la legislación les costaría R$ 1.600 millones (260 millones de dólares) en pérdidas de ingreso al año si es aprobado tal cual.
La propuesta del Senador Carlos Portinho prohibiría la publicidad en vallas publicitarias durante los partidos de fútbol, cuya aparición se restringiría a un período de cinco minutos, antes o después de los partidos, y la publicidad estaría limitado a apenas un sólo operador de apuestas en cada arena.
En un comunicado conjunto, los 16 grandes clubes de la Liga Brasileña de Fútbol (Libra), más 50 otros clubes de las divisiones A, B, C y D, afirmaron que el proyecto de ley “es una prohibición disfrazada de limitación” y puede causar “el colapso financiero de todo el ecosistema deportivo” del fútbol brasileño.
“Las graves pérdidas financieras serán bastante significativas para los grandes clubes. Pero lo que es aún más cruel del texto sustitutivo es que estas nuevas reglas podrían ser definitivas para la supervivencia de los clubes más pequeños”, dijo el comunicado emitido por Libra, que incluye clubes como Flamengo, Palmeiras, São Paulo y Santos.
La Comisión de Deportes del Senado aprobó el miércoles el Proyecto de Ley nº 2.985/23 con limitaciones comerciales a la difusión de publicidad de operadores de apuestas y, luego de pasar por el plenario, el texto fue enviado a la Cámara de Diputados para su consideración.
El objetivo es proteger a los segmentos vulnerables de la población de los riesgos del juego, como la ludopatía, sobre todo entre los menores de edad, pero tendría consecuencias para los ingresos de los clubes que hoy en día dependen financieramente del patrocinio de las casas de apuestas.
Si llegara a ser promulgada como ley, se prohibiría toda publicidad de apuestas durante la transmisión en vivo de un evento deportivo, así como la muestra de cuotas dinámicas o probabilidades actualizadas en tiempo real durante la transmisión el partido, excepto en los sitios o aplicaciones de los operadores autorizados.
Quedará prohibido publicitar sitios de apuestas en los medios impresos, y la publicidad en la televisión abierta o por suscripción, streaming, redes sociales e internet se permitirá solamente en un horario específico: entre las 19:30 y las 00:00 horas. La publicidad en radio se permitirá entre las 9:00 a 11:00 y de 17:00 a 19:30 horas.
No se podrá usar en la publicidad la imagen o participación de atletas, ex-atletas, artistas, comunicadores, influencers, autoridades o miembros de comités técnicos profesionales. Gracias a una enmienda propuesta por el Senador Romario, los exatletas podrán anunciar apuestas, pero solamente después de cinco años de retirados el deporte, una excepción para ayudar a deportistas con dificultades económicas.
El patrocinio directo o indirecto por parte de operadores de apuestas de cuota fija a árbitros y otros miembros del cuerpo arbitral de competiciones deportivas queda explícitamente prohibido.
Asimismo quedaría prohibido el uso de animaciones, dibujos, mascotas, personajes o cualquier recurso audiovisual, incluidos los generados por inteligencia artificial, que estén dirigidos a niños y jóvenes, directa o subliminalmente, al igual que acciones de comunicación que enseñen o fomenten, directa o subliminalmente, la práctica de juegos de azar.
“La propuesta consiste en encontrar una manera no de prohibir completamente la publicidad de las apuestas deportivas, sino de regular la publicidad sobre apuestas, reduciendo considerablemente el alcance a jóvenes y niños, quienes, de hecho, no son ni deberían ser el público objetivo de las apuestas, evitando el marketing de emboscada presente principalmente en estadios y pabellones deportivos, pero, por otro lado, valorando las propiedades publicitarias y el patrocinio”, declaró el senador Portinho.
El texto de Portinho permite a los agentes operadores de apuestas patrocinar equipos deportivos mediante la colocación de sus marcas en los uniformes, el equipamiento y el material de juego de los equipos.
La prohibición se mantiene para el uso de uniformes de atletas menores de 18 años. Además, la venta de uniformes de asociaciones o equipos deportivos patrocinados por operadores, cuando estén destinados a niños y jóvenes o se ofrezcan en tallas infantiles, no podrán llevar la marca, el logotipo ni ningún otro elemento identificativo del patrocinador.