Uruguay es uno de los pocos países en Latino América donde el juego online internacional no tiene ninguna regulación, es más, solo proveedores locales pueden operar dentro del territorio uruguayo, los operadores más importantes del exterior tienen su dominio bloqueado.
Mientras en el gobierno se sigue discutiendo la posibilidad de abrir sus fronteras a competencia del exterior, un disputado, Álvaro Dastugue, va a presentar un proyecto de ley donde se acortan los horarios de los casinos como una medida de combatir el juego problemático.
“En la Comisión de Adicciones vamos a tratar el tema de la adicción a la ludopatía y presentamos un proyecto de ley con tres patas, una pata es prevención…”
Dastugue aseguró en una entrevista radial local, “Luego creemos que se debe reducir el horario de los casinos, ya que carecen de ventilación natural, sumado a eso los colores fuertes y los ruidos de las máquinas y las alertas fuertes generan una adicción y el jugador pierde la noción del tiempo”.
Según Dastugue, hay 35.000 uruguayos con problemas de adicción al juego y 170.000 mil son afectados por personas que tienen esta adicción. El nuevo proyecto de ley también busca quitar los cajeros electrónicos dentro los establecimientos como a su vez poner carteles con líneas de ayuda para los que sufren una adicción.
En Uruguay hay una fuerte presencia de los casinos físicos en la capital de Montevideo y otros sectores en el país como Salto, Rocha, Paysandú y Bella Unión.