La ciudad de Nueva York lista para bonanza de casinos de 5.5 mil millones de dólares

Steve Cohen, Bally’s, Genting Resorts World —y sí, no olvidemos al Sr. Pres­i­dente— final­mente, tras una avalan­cha de prop­ues­tas de miles de mil­lones de dólares, comien­za el juego de los casi­nos en la Gran Man­zana. El edi­tor en jefe de iGam­ing­Fu­ture, André Dubron­s­ki, infor­ma sobre los ganadores.

Y entonces quedaron tres. No “quizás”, sino defin­i­ti­va­mente: el pres­i­dente, un supuesto insid­er trad­er y lo mejor de Mala­sia. Nue­va York final­mente se prepara para un boom de com­ple­jos de casi­nos por US$5.000 mil­lones.

El grupo está encabeza­do por el mul­ti­mil­lonario gestor de hedge funds Steve Cohen, con­tro­ver­tido propi­etario del equipo de béis­bol New York Mets; Bally’s, que está desar­rol­lan­do un cam­po de golf munic­i­pal en el Bronx, ante­ri­or­mente propiedad de la Orga­ni­zación Trump; y el Grupo Genting de Mala­sia, que aho­ra ampli­ará su operación de juego tipo raci­no —solo máquinas trag­a­monedas— en el hipó­dro­mo de Aque­duct, en el dis­tri­to de Queens.

Los tres obtu­vieron ayer (15 de diciem­bre) la aprobación final de la Comisión de Jue­gos del Esta­do de Nue­va York para con­stru­ir los primeros com­ple­jos de casi­nos ple­na­mente desar­rol­la­dos de la Gran Man­zana, ponien­do fin a una car­rera por las licen­cias que comen­zó en 2013 y luego quedó estanca­da durante 12 años, antes de ser reac­ti­va­da a comien­zos de este año con ocho com­peti­dores.

Orga­ni­zación Trump

Cada uno pagará una tasa de licen­cia de US$500 mil­lones y se esti­ma que, en con­jun­to, gener­arán alrede­dor de US$5.300 mil­lones anuales en ingre­sos para 2033, con los cor­re­spon­di­entes impuestos para las arcas estatales.

Más allá de la conex­ión pres­i­den­cial —la Orga­ni­zación Trump embol­sará aho­ra otros US$115 mil­lones como parte del acuer­do por el cual vendió el arren­damien­to de su emblemáti­co Fer­ry Point Golf Links en el Bronx a Bally’s—, el plan de Steve Cohen para desar­rol­lar Met­ro­pol­i­tan Park alrede­dor del esta­dio Citi Field de su equipo de béis­bol en Queens es, sin duda, la gran estrel­la del proyec­to.

El casi­no de Cohen, que se con­stru­irá en aso­ciación con los exper­i­men­ta­dos emprende­dores del juego Hard Rock Inter­na­tion­al, costará un esti­ma­do de US$8.000 mil­lones y trans­for­mará una zona indus­tri­al y des­gas­ta­da del dis­tri­to más grande y ori­en­tal de Nue­va York.

Con­tará con un casi­no Hard Rock, hotel, recin­to para músi­ca en vivo, food hall, 25 acres de espa­cios verdes públi­cos y gener­ará miles de empleos.

Insid­er trad­ing

Se espera que la con­struc­ción comience en cuestión de sem­anas, con una aper­tu­ra pre­vista para 2030.

Cohen, que dirige el hedge fund Point72 Asset Man­age­ment de US$42.000 mil­lones y com­pró a los New York Mets en 2020 por US$2.400 mil­lones, es una figu­ra con­tro­ver­ti­da, que estu­vo a pun­to de enfrentar car­gos por uso de infor­ma­ción priv­i­le­gia­da en 2013.

Tras 12 años de espera, el casi­no a todo vapor lle­ga a la Gran Man­zana.

Su ante­ri­or hedge fund, SAC, fue san­ciona­do entonces con US$1.800 mil­lones por “insid­er trad­ing sus­tan­cial y gen­er­al­iza­do a una escala sin prece­dentes cono­ci­dos en la indus­tria de los hedge funds”, y Cohen, hoy de 69 años, se tomó una pausa de cin­co años del trad­ing direc­to.

Su prome­sa de empleo masi­vo y trans­for­ma­ción económi­ca de la zona ha logra­do con­vencer a la may­oría de los escép­ti­cos más duros, al menos por aho­ra.

Juego total

Sin embar­go, per­sis­ten los temores sobre el impacto neg­a­ti­vo del juego y la adic­ción.

Mien­tras tan­to, el Grupo Genting de Mala­sia, a través de su fil­ial ínte­gra­mente con­tro­la­da Resorts World, planea inver­tir US$7.500 mil­lones en su actu­al sitio del raci­no de Aque­duct, cer­ca del aerop­uer­to JFK, tam­bién en Queens, con un nue­vo hotel de 1.600 habita­ciones, un casi­no com­ple­to, una are­na y unas 30 opciones de restau­rantes y bares.

Bally’s, por su parte, planea un desar­rol­lo de US$4.000 mil­lones en el antiguo cam­po de golf propiedad de Trump, que incluirá un casi­no, un hotel de 23 pisos, un cen­tro de con­ven­ciones y espa­cios com­er­ciales.

Cada vez es más raro encon­trar un gran proyec­to financiero sin la pega­josa impronta del Sr. Pres­i­dente escon­di­da en la letra chi­ca.

Pero el juego legal, com­ple­to y en 360 gra­dos, final­mente ha lle­ga­do a la Gran Man­zana.

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