Apoyo del ministro puede acelerar legalización de casinos en Brasil

Las declara­ciones a favor de la legal­ización de los casi­nos físi­cos en Brasil del Min­istro de Hacien­da Fer­nan­do Had­dad han aumen­ta­do las esper­an­zas del sec­tor del juego de que el proyec­to de ley para­do en el Sena­do pue­da avan­zar pron­to para su aprobación y even­tu­al san­ción pres­i­den­cial.

El proyec­to de ley 2.234/22, ya aproba­do en la Cámara y en comi­siones del Sena­do, está en tramite en la cámara alta pero su pase a votación en el ple­nario fue poster­ga­do en julio has­ta nue­va fecha.

La legal­ización tiene el poten­cial de atraer grandes inver­siones en el desar­rol­lo de resorts hotele­ros con casi­nos, una activi­dad pro­hibi­da des­de 1946. Las esti­ma­ciones oscilan entre $18,000 mil­lones de dólares en cin­co años has­ta $70,000 mil­lones de dólares, depen­di­en­do del alcance de los proyec­tos y la infraestruc­tura turís­ti­ca inclu­i­da.

“Las declara­ciones del Min­istro Had­dad a favor del avance de la reg­u­lación de los casi­nos inte­gra­dos en com­ple­jos turís­ti­cos en Brasil siguen la pos­tu­ra del Gob­ier­no Fed­er­al al respec­to. Se tra­ta de una activi­dad económi­ca estratég­i­ca, cen­tra­da prin­ci­pal­mente en cen­tros turís­ti­cos en ubi­ca­ciones especí­fi­cas, y con la reg­u­lación, el poten­cial de creación de empleo y atrac­ción de vis­i­tantes aumen­ta expo­nen­cial­mente”, dijo a iGam­ing­Fu­turo el prin­ci­pal apoy­ador de la leg­is­lación, el Senador Ira­já Abreu.

“La pos­tu­ra del Min­istro de Hacien­da puede con­tribuir en gran medi­da a con­cien­ciar a los senadores de que lo mejor para el país es la legal­ización del juego medi­ante la aprobación del Proyec­to de Ley 2234/22, que legal­iza los casi­nos en com­ple­jos turís­ti­cos y casi­nos turís­ti­cos, el bin­go y el jogo do bicho (juego de azar con ani­males)”, dijo a su vez a IGF el pres­i­dente del Insti­tu­to Brasilero Jogo Legal (IJL), Magn­ho José, quien pre­vé unos 50 casi­nos en Brasil después de su reg­u­lación com­ple­ta.

“El debate sobre la legal­ización del juego en Brasil no debe cen­trarse úni­ca­mente en las enormes inver­siones nacionales e inter­na­cionales, ni en la recau­dación de nuevos impuestos, ni en los miles de empleos que creará. Estos argu­men­tos son obvios y ya no requieren debate. El ver­dadero reto para la leg­is­latu­ra es la creación y el establec­imien­to de leyes y reg­u­la­ciones que per­mi­tan a los ciu­dadanos ejercer su deseo de jugar bajo la aten­ta mira­da de nor­mas estatales clara­mente definidas y su apli­cación efec­ti­va”, señaló Magn­ho José.

Boom para el tur­is­mo

El Min­istro Had­dad abogó por la legal­ización argu­men­tan­do que los casi­nos podrán for­t­ale­cer el tur­is­mo y apor­tar sig­ni­fica­tivos ingre­sos a la economía for­mal, en una entre­vista con el pro­gra­ma Canal Livre de la cade­na Band, donde con­sid­eró un error que el Con­gre­so Nacional haya aproba­do primero las apues­tas online, mien­tras los jue­gos físi­cos siguen sin reg­u­lación.

“Mire, me parece extraño que se apro­baran las apues­tas vir­tuales y no las pres­en­ciales. Porque, en primer lugar: las apues­tas pres­en­ciales no son para las masas que no van a los casi­nos. No son algo pop­u­lar. Son algo para tur­is­tas, en lugares especí­fi­cos, gen­eral­mente con otras atrac­ciones”, dijo Had­dad, quien ha crit­i­ca­do a las apues­tas online por la facil­i­dad de causar ludopatía y endeu­damien­to de famil­ias.

“A difer­en­cia de Las Vegas, la may­oría de los casi­nos se encuen­tran en lugares her­mosos, tan­to nat­ur­al como cul­tural­mente; por lo tan­to, son lugares estratégi­cos que atraen a tur­is­tas que vienen de visi­ta y ter­mi­nan jugan­do en un casi­no. Crea empleos, gen­era tur­is­mo, que, por cier­to, este año Brasil batirá un récord de tur­is­tas. Deberíamos lle­gar a más de nueve mil­lones de tur­is­tas este año”, añadió.

Las apues­tas en línea tiene un mer­ca­do poten­cial de 30 mil­lones de per­sonas reg­istra­dos en Brasil para apos­tar y en el primer semes­tre de este año 17,7 mil­lones de ellos hicieron apues­tas, de acuer­do con un bal­ance divul­ga­do por el min­is­te­rio.