
AIEJA impulsa una nueva política de Estado para modernizar el marco legal, atraer inversión y reducir la ilegalidad. Con una regulación clara, México podría convertirse en líder regional, generando más ingresos fiscales y protección al jugador.
En esta entrevista exclusiva, el Dr. Miguel Ángel Ochoa Sánchez, presidente de AIEJA (Asociación de Permisionarios, Operadores y Proveedores de la Industria del Entretenimiento y Juego de Apuesta en México), comparte su visión sobre el futuro de la industria del juego en el país. Desde la necesidad urgente de actualizar un marco legal que data de hace más de siete décadas, hasta las oportunidades que ofrecen la digitalización, el juego responsable y la adopción de mejores prácticas internacionales, el Dr. Ochoa expone los principales retos y aspiraciones para construir un entorno claro, moderno y competitivo que permita posicionar a México como líder regional en materia de juego y apuestas reguladas.
IGF: La industria aún opera bajo una ley de 1947 aunque fue actualizada en el correr de los años. ¿Qué elementos clave proponen incluir en una nueva ley para que esté alineada con las tendencias digitales y el juego responsable?
MO: En realidad, la Industria del juego en México opera actualmente gracias a un Reglamento del año 2004, modificado en tres ocasiones desde entonces, que vino a ofrecer una vida “moderna” a nuestro sector regido por una Ley Federal de 1947. Es importante subrayar este tema para que se entienda que el mercado mexicano es un mercado regulado, pero que esta situación en la cual un Reglamento viene a superar la jerarquía de la Ley, fragiliza la seguridad jurídica que nuestros empresarios reclaman desde hace años.
En diciembre de 2024, el gobierno de la Presidenta Sheinbaum subrayó públicamente esta anomalía y encargó a la Secretaria de Gobernación, elaborar una propuesta de iniciativa de nueva Ley Federal, a la cual invitó a la Industria en su conjunto, a aportar insumos en distintas mesas temáticas que fueron instaladas a lo largo del primer trimestre de este año. Está claro que el juego online y el juego responsable, fueron contemplados entre los tópicos importantes a incluir. Pero la iniciativa de Ley pretende ofrecer un marco general amplío y moderno, para que después, un nuevo Reglamento de la ley venga a precisar el funcionamiento fino de cada uno de los aspectos a regular. El borrador elaborado por el Ejecutivo Federal debería estar listo muy pronto y posteriormente, será sometido al Poder Legislativo para que, ambas Cámaras, analicen y validen su contenido. Esperamos que el proceso pueda culminar a mediados de 2026.
IGF: ¿Cuál es el mayor reto político y legislativo que enfrenta AIEJA para que se apruebe una verdadera “política de Estado” para el sector del juego?
MO: No creo que sea un reto propio de AIEJA, sino de la Industria mexicana del juego en su conjunto. Vislumbro varias razones que podrían estar en el epicentro de la problemática. En primer lugar, una profunda desconfianza del sector por parte de la autoridad, fruto de un aún mayor desconocimiento de su funcionamiento fino. Y en segundo lugar, una clase política que, a lo largo de estas ocho décadas desde la promulgación de la ley, encontró cierto provecho en mantener este sector de actividad en una zona de múltiples indefiniciones que permitan interpretaciones jurídicas a modo. Y esto a pesar de que nuestra Industria genere empleos de primer nivel para cerca de 200 mil familias mexicanas y contribuya a las arcas federales, estatales y municipales con alrededor de 12 mil millones de pesos al año.
Por eso, AIEJA y sus socios, trabajamos en comunicación permanente con el Regulador en turno, ofreciéndole información e insumos diversos que le permita entender mejor a nuestra Industria, a su actividad, además de intentar revertir esta desconfianza histórica. Desgraciadamente, esta carencia de una política de Estado para nuestro sector, hace que el Regulador no cuente con un equipo técnico transexenal especializado, que ayudaría muchísimo a acelerar el acompañamiento adecuado que requiera nuestra actividad y a valorar a su justa dimensión nuestros aportes a la dinámica económica del país.

AIEJA contempla los eSports
IGF: ¿Planean, por ejemplo, incorporar reglas específicas para eSports, apuestas en tiempo real o juegos con crupier en vivo?
MO: Como le explicaba anteriormente, la primera etapa es lograr una actualización de la Ley Federal que asiente un marco jurídico general, y permita el desarrollo ordenado de todas las actividades existentes y por nacer, con miras a un futuro mediano. Las reglas específicas se plasmarán posteriormente en el Reglamento de la ley. Pero está clarísimo que eSports, casinos en vivo y otros temas vinculados con las apuestas deportivas en tiempo real estarán contempladas. Al menos trabajamos en este sentido.
Este aparente retraso normativo del mercado mexicano del juego, se ha convertido en una gran oportunidad para que la nueva Ley y su Reglamento incorporen lo mejor de las experiencias positivas impulsadas en otros países, evitando repetir los errores que pudieran haberse cometido.
México y operadores ilegales
IGF: ¿Cómo planea AIEJA trabajar para reducir el 60% de operadores ilegales en línea?
MO: Éste sí, es un reto. Y creo que lo es para el mundo entero. La problemática involucra temas de soberanía, de derecho internacional y cooperación policiaca transfronteriza que rebasan por completo la competencia de AIEJA y de sus operadores afiliados. No obstante, hemos insistido con la autoridad acrecentar la vigilancia de la policía cibernética, dotarla de la capacidad para bloquear señales y páginas digitales que no estén reconocidas por el Regulador, además de contar con la colaboración de las plataformas de procesamientos de pagos para que puedan, a su vez, impedir operaciones financieras de empresas no autorizadas.
Pero no todo debería ser represión. Nuestros colegas colombianos, por ejemplo, han enfrentado la problemática ofreciendo a los operadores ilegales o no reconocidos por la autoridad local, un lapso para regularizarse, acompañado de ciertos incentivos para que, finalmente, el mercado, el Estado y los jugadores, terminen ganando.

IGF: Mirando a 5 o 10 años, ¿qué impacto estiman que tendría una regulación clara en la inversión extranjera directa?
MO: No tengo duda de que si México logra dotarse de una ley moderna, flexible, con visión de futuro y que contemple las mejores prácticas aceptadas a nivel internacional, el mercado nacional crecerá de manera sustancial y atraerá inversionistas y empresarios que, desde hace años, esperan esta confirmación de seguridad jurídica.
Y la certidumbre jurídica, no solo es necesaria para la inversión, sino que provocaría una mirada muy atractiva del mundo hacia el mercado mexicano. En las múltiples ferias internacionales a las cuales participo y/o asisto, México despierta un gran interés entre operadores de todos los continentes; no solamente de América y Europa, sino también de Asia, y de los emergentes mercados de África y Oceanía.
En la actualidad, México tiene todo para competir dignamente con los principales mercados del juego. Falta este último paso que nos permitiría insertarnos de lleno en el concierto de los grandes.
IGF: ¿AIEJA contempla alianzas con operadores internacionales o asociaciones de otros países para intercambiar mejores prácticas de regulación y tecnología?
MO: No solamente lo contempla, sino que desde hace años hemos construido relaciones con operadores internacionales, varios de ellos afiliados a AIEJA, y mantenemos una comunicación constante y constructiva con nuestros homólogos de casi todos nuestros vecinos latinoamericanos, del Caribe y de América del Norte.
Una muestra del camino recorrido en este sentido, será la celebración de una sesión de trabajo en el marco de “GAT Expo CDMX 2025” ‑26 al 28 de agosto próximo en Ciudad de México‑, que pretende reunir a las principales asociaciones latinoamericanas del juego para analizar y avanzar en la constitución de lo que podría convertirse en el nacimiento de una federación internacional de asociaciones del juego. La historia nos dirá si logramos concretar esta vieja propuesta, pero el ánimo para ello, está a la orden del día.
IGF: ¿Cómo ven el papel de la inteligencia artificial y la tecnología blockchain en la trazabilidad y transparencia de las apuestas en línea en México?
MO: La velocidad a la cual evoluciona el mundo online en todas sus dimensiones y vertientes, maravilla y abruma a la vez. Pero no cabe duda de que la Inteligencia Artificial está transformando profundamente el ecosistema no solamente del iGaming, sino de la sociedad en su conjunto. Y como en toda gran evolución que marque un parteaguas, estas innovaciones tienen grandes beneficios, pero también generan efectos colaterales no siempre positivos. Como humanidad, estamos enfrentando nuevos retos que nos obligan a actualizar nuestros marcos jurídicos, impulsar mayores coordinaciones e intercambios de información transfronterizos, además de involucrar análisis sociales, culturales y éticos antes de tomar decisiones. Por desgracia, estos complejos procesos van siempre detrás, y a veces a años luz, de las galopantes innovaciones que, de forma casi cotidiana, surgen de los laboratorios tecnológicos alrededor del mundo.
Está claro que, para nuestra Industria, el apoyo de la IA en la trazabilidad de los apostadores y de sus flujos financieros, viene a afinar aún más los perfiles y hábitos de nuestros clientes, además de permitir un mayor control en cuanto a la identificación y transparencia del dinero que circula, sobre todo cuando ése es también virtual. En lo personal, estoy convencido de que el futuro cercano del iGaming estará en manos de los operadores que más inviertan en innovación y tecnología, permitiéndoles una gestión mucho más eficaz, personalizada e inteligente de sus plataformas y productos. La IA, hoy en día, no es opcional. Pero sí, requiere de una urgente reflexión ética y de unos límites que todavía están por diseñarse.
IGF: Si lograran implementar una “política de Estado” integral, ¿qué resultados concretos les gustaría ver dentro de 5 años para considerar que el esfuerzo fue exitoso?
MO: No hay ciencia más inexactas, que la politología. Y no me gustaría pecar de ingenuo. Pero admitiendo que fuéramos a lograr este cuadro idílico al cual todos aspiramos, no dudo en que alcanzaríamos a ubicar al mercado mexicano del juego entre los más atractivos del orbe. Tanto en su vertiente física, como en la oferta digital que se ofrecería.
En la actualidad, los más de 400 casinos en operación, repartidos en 30 de los 32 Estados que conforman nuestra República, reciben anualmente alrededor de 8 millones de visitas. Con una promoción y una apertura adecuada de este mundo del entretenimiento privado por parte del Estado mismo, podríamos, sin problema, atraer millones de turistas del juego provenientes de otros países y generar nuevos polos de desarrollo en múltiples lugares de este gran país. Y sumando el crecimiento exponencial de una oferta online adecuadamente ordenada y regulada, con los incentivos fiscales idóneos, permitiría generar unas contribuciones hacendarias que propulsarían a nuestra Industria entre los sectores que sí son relevantes para el PIB nacional.
No hay fórmula mágica, pero sí una simple clave: que el gobierno entienda cómo funciona nuestra Industria, que lo regule con visión de futuro sin asfixiarlo y lo contemple como otro sector productivo más de la dinámica económica del país. Con esto, todos ganaríamos.
Notas del editor:
La conversación con el Dr. Miguel Ángel Ochoa Sánchez muestra que la industria del juego en México está ante la gran oportunidad de transformar sus bases legales y operativas para responder a un mundo cada vez más digital, competitivo y exigente en términos de responsabilidad social. Contar con una nueva Ley Federal moderna y un Reglamento claro permitirá fortalecer la seguridad jurídica, atraer inversión nacional y extranjera, y consolidar al sector como un generador clave de empleos, ingresos fiscales y desarrollo turístico en distintas regiones del país.
Mirando hacia los próximos cinco o diez años, el reto y la meta es clara: lograr que México se convierta en un referente latinoamericano y global de regulación eficiente, innovación tecnológica e impulso a prácticas de juego responsable. Si se consolida una verdadera política de Estado para el sector, con reglas claras para nuevas modalidades como eSports, apuestas en vivo y casinos online, además de alianzas estratégicas internacionales, la industria mexicana del juego podrá competir de tú a tú con los mercados más avanzados, generando beneficios tangibles para miles de familias y para la economía nacional en su conjunto.