Mantente firme en Bucking Rider — El próximo juego de Crashback™ de Play’n GO


Play’n GO lan­za Buck­ing Rid­er, el últi­mo juego de esti­lo arcade con la mecáni­ca Crash­back™ propia del estu­dio. Dis­eña­do para brindar emo­ción y sim­pli­ci­dad a todos los jugadores, este títu­lo es un desafío cal­cu­la­do a lo con­ven­cional: invi­ta a los jugadores a pon­er a prue­ba sus nervios en un paseo sal­va­je en toro que puede dis­pararse has­ta 5000 veces la apues­ta.

Buck­ing Rid­er cam­bia los tradi­cionales rodil­los de las trag­a­monedas por una toma de deci­siones ráp­i­da. A medi­da que el mul­ti­pli­cador sube de 1x a un posi­ble 5000x, los jugadores deben ele­gir el momen­to per­fec­to para reti­rarse o arries­garse a ser des­pe­di­dos cuan­do el toro embiste al jinete. Y con la car­ac­terís­ti­ca Crash­back™ hacien­do su regre­so, hay una segun­da opor­tu­nidad en juego. Si los jugadores se reti­ran, el paseo con­tinúa per­mi­tién­doles volver a entrar para optar a un mul­ti­pli­cador aún may­or.

La estéti­ca polvorien­ta de rodeo del juego y las ani­ma­ciones ráp­i­das trasladan la ten­sión de una are­na en vivo a los jugadores. No hay necesi­dad de perseguir sím­bo­los o líneas de pago: Buck­ing Rid­er se tra­ta de ries­go puro ver­sus rec­om­pen­sa, ponien­do las rien­das direc­ta­mente en manos del jugador.

Este lan­za­mien­to se basa en las bases estable­ci­das por Min­er Don­key Trou­ble, y parece ser otra fan­tás­ti­ca entre­ga que pre­sen­ta un inno­vador mecan­is­mo nue­vo, con­tin­uan­do así el impul­so de Play’n GO por expandir los límites del género, como con jue­gos como Lega­cy of Dead Blitzways™. Tan­to los afi­ciona­dos a los títu­los de esti­lo arcade como los recién lle­ga­dos al casi­no encon­trarán en Buck­ing Rid­er una mez­cla impac­tante de habil­i­dad, sin­cronización y espec­tácu­lo.

George Olek­szy, respon­s­able de reten­ción de jue­gos de Play’n GO, dijo: “Buck­ing Rid­er está dis­eña­do para cam­biar las cosas. Con la fun­ción Crash­back™, los jugadores no solo están miran­do, están toman­do deci­siones en frac­ciones de segun­do que pueden con­ver­tirse en rec­om­pen­sas serias. Es un for­ma­to atre­v­i­do que amplía lo que puede ser un juego de casi­no.”

Este no es solo otro paseo, es una prue­ba de nervio­sis­mo, y uno que los jugadores quer­rán tomar una y otra vez.

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