
João Fraga es el CEO de Paag, un proveedor local de soluciones de pago en Brasil. Fraga estuvo presente en nuestro almuerzo en São Paulo durante la conferencia SiGMA en abril, donde se reunió con IGF para conversar sobre la evolución del mercado brasileño en lo que respecta a las opciones y soluciones de pago.
Fraga, ingeniero de software autodidacta, compartió con nosotros su visión sobre las nuevas tendencias del sector, los desafíos actuales, la protección contra el lavado de dinero, los nuevos riesgos emergentes y el futuro de las soluciones de pago en el país.
IGF: ¿Cuáles son las tendencias actuales en determinados medios de pago en Brasil?
JF: Los medios de pago se han adaptado rápidamente a las nuevas reglas y a los nuevos comportamientos de los operadores y actores del mercado, ajustándose también con innovaciones e incrementos de inteligencia para prevenir fraudes y garantizar la seguridad en las operaciones financieras.
Paag, en particular, ha buscado cada vez más actuar junto a los operadores, comprendiendo la necesidad real, que va más allá de completar el pago. El 7 de abril, anunciamos la asociación y fusión con el Banco BS2, lo cual brindará aún más tecnología, nuevos productos y robustez al proceso financiero.
Una de nuestras grandes oportunidades es utilizar el open finance para ofrecer mayor agilidad en el procesamiento de pagos, incluyendo autenticación biométrica, reconocimiento facial y expansión del modelo de pago por proximidad y pagos automáticos, fortaleciendo así la seguridad para el usuario final.
IGF: ¿Cuáles son los mayores desafíos que enfrenta una empresa como la suya en el mercado brasileño?
JF: Sin duda, garantizar procesos seguros y conformes a las normativas es el desafío de toda empresa que tiene como premisa el cumplimiento regulatorio. Desde el primer día del mercado regulado, Paag opera únicamente con casas reguladas y que hayan completado su proceso de licencia. Nuestro objetivo es desarrollar un producto que ayude al operador en su día a día y aporte fluidez al proceso que realiza el jugador cuando accede a un entorno de entretenimiento seguro.
No se trata únicamente del costo de una transacción financiera, sino de un conjunto de factores y procesos estratégicamente diseñados. La prevención del lavado de dinero, la financiación del terrorismo y otras prácticas delictivas no deben tener cabida en esta industria. Este es nuestro compromiso: garantizar las mejores prácticas para las transacciones financieras.
IGF: ¿Cómo describiría el escenario actual de AML (Prevención del Lavado de Dinero) y fraudes en Brasil, especialmente en relación con los pagos digitales y transacciones vinculadas al sector de juegos?
JF: Dentro de las directrices de la regulación del sector, ya se sabe, por ejemplo, que es responsabilidad de las casas de apuestas adoptar políticas claras para combatir prácticas ilícitas, como la identificación, calificación y clasificación de riesgo de los apostadores, además de reportar todas las transacciones sospechosas al Consejo de Control de Actividades Financieras (Coaf). En el ámbito de los pagos, también hubo preocupación por permitir únicamente medios de pago rastreables, como el Pix, y prohibir métodos como boletos bancarios y dinero en efectivo.
También cabe destacar que con el inicio del mercado regulado, las discusiones en torno a la prevención del lavado de dinero, así como otros temas importantes, se han vuelto mucho más profundas y estratégicas. En Paag también hemos puesto énfasis en este tema y trabajamos mucho en esta área, incluso con productos que puedan ayudar a las casas de apuestas en esta cuestión.
Por ejemplo, Paag Shield permite obtener datos en tiempo real sobre movimientos sospechosos de los jugadores, lo que incluye el monitoreo de patrones de comportamiento, riesgos potenciales, sugerencia de solicitud de documentos para comprobar ingresos del jugador, cálculo de puntuación de riesgo del apostador y análisis de comportamiento, ayudando también a reportar cualquier actividad necesaria a las autoridades competentes.
IGF: ¿Cuáles son los principales riesgos a los que deben estar atentos los operadores?
JF: Los principales riesgos a los que están expuestos los operadores giran en torno a los más variados tipos de fraudes que pueden ocurrir si no existe la debida supervisión y la implementación de un sistema robusto para prevenir irregularidades.
La cuestión del lavado de dinero es uno de los puntos de mayor atención, ya que las plataformas manejan grandes volúmenes. Otro tema complejo, que no depende únicamente de las casas de apuestas, es la manipulación de resultados, en la que también pueden verse perjudicadas debido a estos esquemas delictivos.
Las apuestas ilegales también son perjudiciales, incluso porque pueden atraer jugadores hacia el mercado irregular.
Esto es dañino no solo para el ecosistema, sino también para los propios jugadores, ya que en una casa de apuestas regulada hay mucha más seguridad en lo que respecta a la prevención de la ludopatía, monitoreo de comportamientos sospechosos para prevenir fraudes, posibilidad de autoexclusión si el jugador está apostando en exceso, además, por supuesto, de la garantía de que el valor ganado en una apuesta será efectivamente destinado al apostador.
IGF: ¿Cuál es su visión sobre el futuro de Brasil en relación con las soluciones de pago y el iGaming? ¿Qué debería cambiar a partir de ahora?
JF: La visión de todos los que están actuando en este mercado debe ser de mucha oportunidad y aprendizaje. Cualquier proceso regulatorio exige mucho de todas las partes. Pero, superada la fase de adaptación, desarrollo de controles y comprensión clara de los roles y responsabilidades, el futuro es muy prometedor.
El mercado de juegos es reconocido mundialmente y funciona de forma segura tanto para el operador como para el jugador. Creemos que la educación, una vez más, es lo que garantiza la comprensión pasiva del juego y su finalidad como entretenimiento. Por eso, creemos firmemente en el papel social de los organismos reguladores, las casas de apuestas y las plataformas de iGaming. ¡Brasil necesitará esto para evolucionar!