
Gustavo Henrique Pereira, Chief Legal Officer (CLO) del Grupo Aposta Ganha, conversó con IGF y ofreció una mirada detallada sobre el panorama actual y futuro del marco regulatorio de las apuestas y los juegos en Brasil. En la entrevista, el abogado abordó los principales desafíos del sector, como la competencia desleal del mercado ilegal, la necesidad de garantizar seguridad jurídica, la relación con el ente regulador y el impacto creciente de tecnologías como la inteligencia artificial.
Pereira también reflexionó sobre el rol estratégico del área legal dentro de las empresas, la importancia de la protección al consumidor y las medidas contra el lavado de dinero, además de anticipar posibles desarrollos regulatorios que podrían transformar la industria en los próximos años.
IGF: ¿Cómo anticipas que el marco regulatorio de Brasil para apuestas y juegos evolucionará en los próximos 2 a 3 años?
GP: Tal vez esta sea la pregunta que más resuena dentro de las sedes de los operadores del país. Estamos viviendo momentos difíciles en cuanto al futuro del mercado. A pesar de un riguroso proceso regulatorio, altos costos operativos y siendo uno de los sectores que más recauda en el país, el mercado ilegal sigue muy activo y existen incertidumbres sobre el futuro de las apuestas incluso dentro del propio Gobierno Federal.
Sin embargo, suelo ser optimista y estoy confiado en que estamos en evolución. Por eso, espero que los próximos años sean prometedores, con mayor seguridad para los operadores y confianza por parte de los usuarios.
IGF: ¿Cuál es el papel que visualizas para el Chief Legal Officer (CLO) a medida que Brasil finaliza y aplica su legislación sobre apuestas deportivas?
GP: El papel principal es mantener nuestra operación dentro de las conformidades legales, velando por la seguridad jurídica de nuestros actos. Liderar los equipos legales y de cumplimiento es un trabajo continuo de estudio, monitoreo y relación con el regulador. Creo que estas premisas se mantendrán en todo momento.
IGF: ¿Cuáles son los principales desafíos o áreas grises que aún existen en el escenario regulatorio brasileño y cómo lidias con ellos?
GP: Sin duda, la competencia desleal del mercado ilegal. Es prácticamente inviable sostener cualquier mercado regulado frente a un mercado ilegal tan agresivo. Transmitir seguridad al usuario e innovar en nuestras actividades es la mejor forma de orientar nuestra operación y mantenernos como uno de los mayores del país.
IGF: Prevés una convergencia entre las regulaciones de apuestas y las leyes más amplias de protección del consumidor digital en Brasil?
GP: Esa convergencia ya existe y estamos tranquilos respecto a ello. La relación de consumo ya es la base de nuestra operación.

IGF: ¿Cómo te estás preparando para marcos regulatorios que involucren el uso de inteligencia artificial en la definición de probabilidades, perfiles de jugadores y decisiones automatizadas?
GP: Ya contamos con herramientas que analizan el comportamiento del usuario y verificamos si va en contra de nuestra política. Es innegable que el uso de inteligencia artificial ya es una realidad, y corresponde al operador crear mecanismos para impedir el mal uso de sus funcionalidades, así como impulsar la creación de una legislación adecuada que limite su uso.
IGF: ¿Cómo esperas que evolucionen las regulaciones contra el lavado de dinero (AML) en Brasil con la nueva legislación de apuestas?
GP: Somos socios de instituciones financieras que también son bastante rigurosas en cuanto al combate al lavado de dinero, y eso es una gran decisión. Lo digo porque, al cerrar el cerco desde los primeros depósitos, la posibilidad de lavado de dinero se reduce considerablemente. La regulación sobre el tema también debería partir de ahí: desde el registro de usuarios, el análisis de perfil del cliente, el monitoreo de comportamiento y la sanción a quienes no cumplan con las disposiciones legales.
IGF: ¿De qué forma influye la estrategia jurídica en las decisiones de negocio en un entorno donde la regulación aún se está consolidando?
GP: El olfato comercial debe estar presente en todos los sectores de la empresa. El área legal no puede ser diferente. Es mucho más que seguir al pie de la letra las normas: es entender la operación. Es conocer al cliente, los productos y hacia dónde va la empresa. No sirve de nada que el marketing tenga las mentes más creativas si todas sus ideas mueren porque el área jurídica no logra entenderlas ni traducirlas en términos legales que brinden seguridad a esa actividad.
Hay que saber qué es un patrocinio de eventos, qué es el evento y cómo la empresa quiere activar su marca allí, y a partir de eso garantizar la seguridad jurídica dentro del marco regulatorio.
IGF: Si tuvieras que prever un desarrollo legal que podría transformar la industria de las apuestas en Brasil en los próximos cinco años, ¿cuál sería?
GP: Prever es difícil en el escenario actual, pero deseo una participación más activa de los operadores en las decisiones junto a los organismos reguladores y de control. El sector contencioso de las empresas enfrenta un número creciente de demandas que podrían evitarse con una legislación más participativa por parte de quienes hacen el mercado.
Notas del editor:
De cara al futuro, Gustavo Henrique Pereira se muestra optimista, pero con los pies en la tierra. Reconoce que el sector enfrenta desafíos estructurales como la competencia desleal del mercado ilegal y las incertidumbres institucionales, pero confía en que la evolución del marco regulatorio traerá consigo mayor profesionalización, seguridad jurídica y confianza para los operadores y los usuarios.
A medida que la legislación se consolida, el papel estratégico del área legal —no sólo como garante del cumplimiento, sino como socio activo en la toma de decisiones— será clave para definir el rumbo del mercado brasileño. Con la inteligencia artificial, el combate al lavado de dinero y la protección al consumidor como temas centrales, Pereira apuesta por un ecosistema más colaborativo entre operadores y reguladores, capaz de impulsar una industria sólida, segura y sostenible.