Desde enero del 2025, los operadores de apuestas deberán cumplir con una nueva regulación que exige tener sede en Brasil y contar con una autorización específica para patrocinar clubes y eventos deportivos nacionales.
Esta disposición, establecida por una normativa reciente del Ministerio de Hacienda, se publicó el pasado 1 de agosto y marca un cambio significativo en el panorama de las apuestas en el país.
La nueva normativa especifica que únicamente las plataformas que cuenten con la autorización de la Secretaría de Premios y Apuestas podrán llevar a cabo actividades de publicidad o patrocinios deportivos, debiendo además tener representación legal en Brasil.
Esta autorización sólo se concederá a las empresas que sean autorizadas de operar dentro del territorio brasileño y tienen sede fija en el país. Según reporta Focus Gaming, varios operadores aún no han cumplido con los requisitos para su legalización en Brasil. Entre las que han solicitado autorización se encuentran Betnacional, Betano, Superbet, Sportingbet, Rei do Pitaco y Big Brazil (Ceasars Sportsbook), que buscan adaptarse a la nueva normativa para seguir operando en Brasil.
Además de este requisito, la normativa impone otras condiciones clave:
- Prohíbe que influenciadores promocionen las apuestas como una forma de hacerse rico.
- Exige que las plataformas suspendan a los apostadores con historial de adicción.
- Obliga a los proveedores de Internet a bloquear sitios ilegales tras notificación gubernamental.