
La Procuraduría avaló el decreto presidencial que establece un IVA del 19 % sobre las apuestas y juegos en línea en Colombia, siempre que los recursos recaudados se orienten a apoyar a la región del Catatumbo, una zona golpeada por el conflicto armado. Según el organismo, la medida es constitucional y adecuada, ya que su propósito es respaldar iniciativas humanitarias y de seguridad en esa área del país.
En cuanto a la industria, el IVA ha afectado tanto a los usuarios como a los operadores. Según un informe de SBC, la implementación del impuesto provocó una caída del 30 % en la actividad del sector durante el primer mes de vigencia.
A su vez, los jugadores están optando por realizar sus apuestas en sitios no regulados en el país, lo cual podría generar un gran conflicto en un mercado que aún busca consolidarse y posicionarse.
En el mismo informe, Fecoljuegos informó que el presupuesto mensual destinado a apuestas online en plataformas reguladas —que rondaba entre 150.000 y 250.000 pesos colombianos— se redujo en un 50 %, dejando al sector en un estado de incertidumbre y reflexión.
Los operadores locales se han visto obligados a ofrecer bonos de bienvenida muy altos para poder competir con los sitios ilegales.